Cómo experimentar el net.art |
Josephine Bosma |
[ Lo que sigue es una variación sobre el texto del escritor holandés Gerrit Komrij 'Cómo leer poesía' ] No importa el modo en el que nos acerquemos al Net.art, el mundo del observador del net.art, de su audiencia, siempre esta lleno de trampas. He aquí algunos pocos ejemplos: Nunca pregunte a un net.artista qué quiere decir con un trabajo determinado. Es tan estúpido como preguntarse 'qué se supone que representa' una pintura que estés observando. Si una obra net.art representase algo más de lo que muestra, entonces estaríamos hablando de una obra diferente. De acuerdo con esto, una obra net.art puede poseer distintos significados y connotaciones en función de sus distintos usuarios. Además, la obra puede significar -esto- hoy y -aquello- dentro de cinco años. Uno no puede asir definitivamente un trabajo net.art. Una obra net.art posee un contenido dinámico. Nunca admire una obra net.art porque en la red funcione muy velozmente. O porque se 'vea tan bien...'. Aplique también estas observaciones para el sonido de un violin o la vista de un paisaje. Tampoco diga nunca que una obra net.art le condiciona estéticamente. Guarde ese tipo de comentarios para su visita al peluquero o manicura. Nunca intente extraer sabias lecciones de una obra net.art. Los profesores de instituto no están a favor del net.art, aún cuando algunos hayan sido net.artistas por error. Los net.artistas a menudo no comprenden el mundo para nada. Pueden ser tan estúpidos como su audiencia. Las obras net.art lo comprenden todo. Nunca crea que una obra net.art, al igual que un net.artista, miente descaradamente. No hay mentiras en el ciberespacio. En una obra net.art el mundo puede ser cuadrado, la teoría mediática puede ser una naranja y la hierba ser azul. Nunca se confunda cuando lea las palabras 'mi' o 'yo' en una obra net.art. El creador de una buena obra net.art siempre se refiriere a otros con estas palabras, incluso cuando hablan de sí mismos. Nunca suponga que una obra net.art resulta clara y comprensible. En ese caso lo mejor sería adoptar otro enfoque. Cuando una obra net.art parece sencilla y cristalina, incluso entonces seguirá pareciendo incomprensible cómo el artista obtuvo esa sencillez y claridad. Esto es: si se trata de una buena obra net.art. Nunca asuma que una obra net.art es algo oscuro e incomprensible. Incluso cuando no entienda ni siquiera un byte de ella, incluso si, con respecto a sus segmentos parece tan oscura como el cielo nocturno, siempre existe un punto desde el cual la podrá comprender. Entender por ejemplo, que se trata de una obra net.art. Esto es: si se trata de una buena obra net.art. No se pregunte si una obra net.art descentralizada utiliza bien su propia red, al igual que nunca debería preguntarse por qué una obra net.art no descentralizada no está en red. Son cuestiones banales. Cada obra net.art esta hecha de la red. Asociaciones, alianzas, códigos, robos, rupturas, hasta los sistemas autónomos, no son sino disfraces de la red. Piense en las figuras del código, en cada apunte y truco técnico: no conforman el escenario de la obra net.art, son la propia obra net.art. Empiece a dudar seriamente sobre su derecho a vivir si nunca se le saltan las lágrimas después de presenciar una obra net.art. Pero de un modo existencial, proviniendo de su diafragma. No piense que ya ha visto suficientes obras net.art. En cualquier momento dado puede aparecer inesperádamente una obra que desestabilice todo lo que haya visto antes. Algunas indicaciones para tener una mejor relación cotidiana con el net.art. Iniciándose y abordando el net.art desde todos sus puntos sin limitarse en sus propios gustos o preferencias -la casa del net.art tiene muchas habitaciones- al final llegará a acostumbrarse a la idea de que nunca llegará a acostumbrarse realmente al net.art. El net.art es como el vigilante perro guardián de su jardín. Hay algo en el net.art, como en la música o la poesía que no puede traducirse en palabras, y ya que el net.art es algo hecho con información parece tremendamente alienante en un principio, lo cual es algo que no parece que queramos aceptar. Es como si no nos estuviera dando algo que podría darnos. Hasta que descubrimos que en esas reservas secretas se aloja su verdadero poder. Previamente he hablado del net.art únicamente de un modo categórico. He partido de lo que veo que es el enfoque ideal: entender una obra net.art actual, bien como un ejemplo, bien como un punto de partida. Sólo a través de una obra net.art alguien podrá decir algo sobre otra obra net.art, e incluso en ese caso, sólo podrá hacerlo sobre esa obra en particular. Se comete un gran error atacando una obra net.art mediante conclusiones sacadas de la lectura de otra obra net.art. Las generalizaciones son el enemigo mortal del net.art. Sólo poniendo juntas varias obras net.art u observándolas próximas las unas a las otras podríamos obtener algo mínimamente claro acerca del net.art. Me doy cuenta de que esto difícilmente es un consuelo. original difundido a través de nettime i [ Traducción: David García Casado ] |